Tuesday, January 26, 2021

GUÍA PARA ODIAR (MEJOR) A PABLO IGLESIAS

 


El hastío que me produce el tema Pablo Iglesias me está pudiendo: su legión de enemigos es tan activa y nutrida que estoy a punto de darme por vencido. No es por convicción, es que uno tiene sus límites, y para colmo, ni siquiera el personaje me suscita tantas simpatías como dejarme trozos del alma en el empeño. En cualquier caso, lo siento, pero ésta tampoco me la pienso comer.  


La cosa es muy sencilla. En su entrevista en Salvados, el vice estableció una comparación entre la situación de Puigdemont y los exiliados de la República. No simpatizo con el Procés, al cual me he opuesto en sucesivas ocasiones, lo cual me ha servido para ganarme algunos improperios. No han sido menos los que me han caído desde el lado opuesto cuando he afirmado que, pese a todo, es perfectamente legítimo el deseo de una Catalunya no inserta en el Estado y que la reivindicación del Referéndum no se deslegitima simplemente aduciendo que no es legal. De otro lado, llevo toda la vida refiriéndome el espíritu de la Segunda República como una de las más gozosas inspiraciones de mi vida. Sobra decirlo: no comparto en absoluto la comparación que hizo Iglesias.


Bien. Y ahora les hago una pregunta: ¿han visto la entrevista completa? En los medios de Prisa se ha destacado únicamente la susodicha comparación, sobre la que Pablo se detiene aproximadamente un uno por cien de una entrevista que dura una hora. La frase exacta no es la que se ha dicho, el contexto en el que aparece no debe obviarse... Además tengo la impresión de que el entrevistador, Gonzo, más fiel al estilo Ferreras-Pastor que al de su predecesor en "Salvados", consiguió ese botín en una de las trampas que tendió al entrevistado, tras pasar todo el diálogo intentando acorralar en sus supuestas contradicciones al líder de Podemos. No cuestiono la dureza de la entrevista ni la evidencia de que Iglesias patinó, lo que yo digo es que para desacreditarle parece que vale absolutamente todo. 


Insisto, vean entera la entrevista. Pablo dijo esa tontada que, por muchas razones, yo no comparto, pero dijo muchas más cosas. Y por momentos estuvo formidable, entre otras cosas porque es un tipo extraordinariamente inteligente y porque al contrario que otros muchos líderes, está muy curtido en batallar en territorios hostiles. 


Permítanme algunas impresiones personales sobre lo dicho en la entrevista, por si, después de todo, deciden que antes que crujir al personaje de forma inmisericorde -como si el fuera el responsable de los males de la patria- conviene documentarse adecuadamente. Ahí van:


-El pacto de Gobierno no es tan ambicioso como hubiera querido UP porque sus líderes saben muy bien que con 35 diputados hay cosas que de ninguna manera se les iban a conceder. 

-Algunos aspectos del pacto, por ejemplo de política social, no se han cumplido porque no quiera UP sino porque, por razones justificables o no,  no ha querido Sánchez. 

-La sensación de desunión en el gobierno de coalición es consecuencia de un debate continuo entre las dos fuerzas firmantes. Me parece muy bien que cuando Iglesias y "sus" ministras defiendan propuestas que creen que van a beneficiar a la ciudadanía se peleen -a gritos, si hace falta- con el resto del Gabinete. 

-UP fue desleal a Sánchez cuando acordó con Bildu el asunto de los desahucios. Decidió comerse todas las broncas que le vinieran porque para UP ese tema es prioritario... Pero también porque en deslealtades a la coalición el PSOE va muy por delante, por ejemplo cuando no reveló a Iglesias la "fuga" del Rey, entre otras muchas inobservancias. 

-Sánchez duerme tranquilo, entre otras cosas porque, a día de hoy, el comportamiento de los ministros de UP no ha sido el de unos irresponsables, empezando por Yolanda Díaz, que me parece con mucho la mejor ministra del Gobierno actual (esto es de mi cosecha). En cualquier caso fue él quien se negó al pacto y nos obligó a unas absurdas segundas elecciones con el fin de destruir a UP. También es él quien siempre, también ahora, ha preferido a Ciudadanos, partido de ideología claramente neoliberal y que tiene acuerdos con Vox. 

-Las presiones de la oligarquía del país sobre el Gobierno de España son brutales. Iglesias lo sospechaba, una vez dentro se ha dado cuenta de que era aún peor de lo que pudo imaginar. Las campañas que contra la presencia de UP en el Gobierno de la nación están lanzando con verdadera fiereza desde los poderes mediáticos reflejan la profecía que un día le hizo Iñaki Gabilondo off the record a Iglesias: "Jamás te dejarán gobernar, pero si lo logras, te destruirán".  


Permítanme una reflexión final. Si Gonzo hubiera aprendido de Évole y no de Ferreras o de Wyoming, quizá, en vez de intentar "pillar" una y otra vez al entrevistado, hubiera reparado sobre algo que éste dijo y que en mi opinión es pavoroso. 


"¿Ha descubierto usted ahora en el Gobierno si de verdad son tan malos los poderosos?" 

"Son peores", contestó. 


En ese momento el periodista no se dio cuenta de que, al fin, había encontrado el verdadero tesoro. Jamás imaginé que un Vicepresidente del Gobierno de España realizará una afirmación tan grave, pues de ella inferimos que vivimos en medio de una "democracia limitada", por no usar palabras gruesas. Algún día, cuando entre todos consigamos echar a la única izquierda digna de tal nombre del Gobierno, Iglesias podrá contar algunas cosas. Lamentablemente, ya será tarde. 


Pero, claro, el problema fue la tontada de Puigdemont. Y a propósito, una última cosita. A menudo nos quejamos de que las declaraciones públicas de los políticos son previsibles, plasticosas, que nos aburren, que están alejados de la gente, etc, etc... Pablo Iglesias no se comportó como un político la otra noche ante Gonzo... Arriesgó, como siempre hace, y dijo una estupidez. Y todos a saco, claro. Luego nos quejamos.


Será que todos sus hostiles, incluyendo a la gente del PSOE, han hecho más por la memoria republicana que Podemos. Sí, debe ser eso. 


No comments: