Saturday, November 09, 2013




EL CIERRE DE RTVV. 
TODOS NOS LO HEMOS BUSCADO.


De pronto, como si de una obra de Pirandello se tratara, los personajes de la farsa detuvieron la representación, se juntaron cara al público y contaron la verdad. No se bajaron del escenario, siguieron allí, y nunca obtuvieron tanta atención. Antes sólo aburrían, interpretaban una obra que nunca se creyeron; ahora la obra se había convertido en ellos mismos, en ellos y en su público, que entendió al fin que la mentira que estos habían protagonizado era también la suya, la de todos. 

Jamás pensé que vería Canal 9 con tanto interés. Canal 9, la negación misma del ejercicio del periodismo, la libertad de expresión y la polifonía política, el bochorno del enchufismo y la dilapidación de los caudales públicos, la servidumbre ideológica... En las escasísimas ocasiones en que ponía el telediario sólo encontraba nuevas razones a favor de la enfermedad que últimamente me acecha cada día con más fuerza: me da vergüenza ser valenciano. 

Es emocionante ver estas últimas horas de emisión porque te topas presentadores sin afeitar, gente a un paso del llanto, indignados que dicen tacos... La vida fluye con toda su espontaneidad, ya nada está bajo control, no hay dirigismo. Se diría que ha estallado la anarquía, cuyo triunfo, como demuestra la historia reiteradamente, es posible sólo en los trayectos efímeros... Hay quien sale del armario y nos explica que el régimen le obligó a prostituirse. Las palabras que no podían usarse, los silencios del esbirro, el peloteo, la asquerosa complacencia. Llama la atención encontrarse a destacados adictos al PP gritándoles a sus jefes -ahora ejecutores- aquello de "¿para eso he estado tantos años comiéndote el culo?". "Sí, para esto", dan ganas de contestarle, "ser un pelota tiene estos riesgos, que uno se va a su casa cuando lo echan sin ninguna dignidad; a fin de cuentas esto era el liberalismo que tanto defendías en las tertulias: hay que optimizar los costes"

Al menos ahora muchos de ellos nos dedican un ejercicio de coraje, han tomado la televisión, en lo que nos recuerda a un estado revolucionario, se encierran, se niegan a clausurar la emisión, intuyendo el trago que pasará el amigo Fabra cuando las fuerzas del orden saquen a rastras a los trabajadores y apaguen las últimas luces de la libertad de expresión en la lengua de todos los valencianos. 

¿Son ellos los culpables? Desde luego, se lo han buscado. Muchos, temo, fueron enchufados, lo cual explica la insorpotable hipertrofia de falsos trabajadores y supuestos asesores en que había caído RTVV, convertida en una cueva de Alí Babá sufragada por la ciudadanía. Las tertulias de Radio Nou sólo dejaban escuchar la voz de la caverna, en los telediarios no aparecía la oposición, las noticias que no les interesaban quedaban directamente silenciadas, se hacía desaparecer a cualquiera que se saliera un centímetro del guión... Habían convertido el Ente en una absoluta mierda, de ahí que la gente se cansara y ya sólo viera, con suerte, La alquería blanca.  En cuanto a los reaccionarios, que por estos lares abundan, dejaron de ver el canal autonómico porque, puestos a ser facha, mejor revolcarse en el fango de Intereconomía, que además es en español.

Y ahora, ¿qué? Ahora sólo resta morir con dignidad. Llama la atención que sólo una sexta parte de la gruesa plantilla se concentrara esta semana ante el Palau de la Generalitat, por más que el lugar se llenara de quienes espontáneamente salieron de sus casas para apoyarles, justamente esos a los que RTVV se ha dedicado a silenciar y ningunear durante tanto tiempo. Hay que ser muy petimetre para quedarse en casa mientras tus compañeros dan la cara para que no te echen, pero conviene recordar cómo esos mismos ignoraron a los trabajadores tradicionales del Ente, a los que los sucesivos esbirros a los que el PP encargó la dirección acosaron y marginaron durante tanto tiempo. ¿Sabian ustedes que a Punt 2 los entendidos le llamaban Guantánamo? Es en esa segunda cadena, ya extinta, donde eran recluidos los del núcleo duro de la plantilla, quizá por eso Punt 2 era lo único que merecía la pena ver. 

Seré sincero, muchas veces yo mismo he deseado que llegara este armagedón para el Ente. Puestos a pagar un medio cuya única función relevante era convencernos de que un hatajo de ladrones, marujas e ineptos eran en realidad unos tipos estupendos que iban a salvarnos, mejor el gran apagón y a otra cosa. ¿Ven? Todos somos culpables de esta atrocidad perpetrada por un hombre demasiado pequeño como para haberlo urdido por sí mismo. Todos, no solo los enchufados de RTVV, hemos permitido que el País Valenciano pulverice un medio en la nostra llèngua que, bien pensado, necesitamos para subsistir como pueblo, si es que tal cosa puede todavía decirse sin que a la gente le dé la risa. 

Nos lo hemos buscado, no hemos hecho suficiente para evitar que nuestros vecinos dejen de votar a un partido que ha convertido en señas de identidad la corrupción, la prostitución de las instituciones, el mal gusto, la irresponsabilidad y el despilfarro. Es una cuestión de higiene que las estructuras de saqueo del país que se han creado en las dos décadas de gobierno de la derecha salten por los aires. Y eso empezará  a conseguirse el día en que abandonen el poder y la política en Valencia recupere las mínimas condiciones exigibles en una democracia... si es que ello aún es posible, claro. 

2 comments:

Tobías said...

Fue algo inaudito: Canal Nou criticando al PP, hablando del accidente del metro, reconociendo sin disimulos la manipulación vergonzosa que han estado aceptando durante todos estos años.... Verás, la pasada semana fui al Micalet a ver a Xavi Castillo en directo, justo cuando se estaban produciendo estos acontecimientos. Castillo ha hecho sátira constante de Canal Nou y ese día no podía dejar de comentar el tema del momento: es un último gesto de dignidad, se debe agradecer que al final hayan manifestado en voz alta lo que todos sabíamos, tal vez sirva para ayudar a tumbar esa estaca tan podrida de la que hablaba Lluis Llach, todo eso es cierto pero, como ironizaba Xavi Castillo..... “aixó, antes”.

No es todo culpa de los trabajadores, está claro, cuando la audiencia abandonó una televisión sesgada, manipulada y llena de programas basura con contratados amiguetes que venían de Madrid, aquí no se movió ni Dios. Se dejó de ver Canal Nou y no se combatió el secuestro de este instrumento de primer orden para la difusión y normalización del valenciano y de la cultura propia. Tampoco es que la oposición reaccionara; la errática postura del PSOE, que siempre ha ido a rebufo del PP, les llevó participar en el entramado de corrupción sacando la mayor tajada posible, sin criticar como debían las políticas de grandes eventos y abandonando cualquier intento de salvar la televisión. Entre otras cosas porque ellos la habían manipulado igual. Solo que el objetivo del PP se hacía cada vez más evidente y estaba muy lejos de los intereses colectivos o de la creación de estructuras de identificación nacional. Es precisamente todo lo contrario, puesto que la visión regionalista del PP es eso, subsidiaria, y nunca le ha interesado un medio independiente y público que defienda los intereses de la sociedad valenciana. El cierre de Canal Nou y la previsible apertura de otro canal privado a medio plazo -entregado al siniestro Pedro J., el primero en difundir la noticia, antes incluso que la propia directora puesta por Fabra- es un paso más hacia la limitación de la democracia en esta comunidad, un paso que intenta salvar lo que parece una irremediable degradación de las posibilidades electorales de la derecha. A pesar de ese voto inamovible del post blaverismo, que ha ido imponiendo todos sus intereses a cambio de su masivo apoyo social -esa especie de vis anticatalanista que tanto se ha trabajado por aquí-.

Una última cosa, la excusa de este personaje irrelevante, auténtica marioneta del gobierno, cautivo de las decisiones que se toman fuera de la Comunidad, el señorito Fabra. Fabra es el ejemplo más claro de la degradación de la democracia en Valencia, somos una autonomía intervenida por los desastres y calamidades generadas por su propio partido, el resultado es que hemos perdido el autogobierno. Esto es grave, pero que encima quieran burlarse de todos arguyendo que el cierre de la televisión salvará hospitales y colegios es ya tan ignomioso (calcúlese el despilfarro en dinero público que viene causando el PP desde que gobierna) que no solo es imprescindible desalojarlos cuanto antes, empiezo a pensar que son necesarias responsabilidades penales.

David P.Montesinos said...

Hace mucho que espero responsabilidades penales que, por cierto, nunca acaban de llegar del todo. No hay más que fijarse en el tema de la CAM, que veremos dónde va a parar, pero que sospecho que en el mejor de los casos sólo afectará a los actores secundarios, y se me ocurre pensar por qué algunos dirigentes de alto calado como el ex-conseller Olivas parece que se van de rositas, a pesar de todo el terrible daño causado a los valencianos.

De otro lado comparto lo de la atonía del PSOE, aunque no tengo la impresión de que sea una crítica aplicable al total de la oposición, el problema Compromís o EU es la precariedad en que se hallan en las batallas parlamentarias, ojalá esto cambie próximamente. Un matiz, el ente autonómico fue creado en tiempos de Lerma. Sería ingenuo por mi parte considerar inocente al partido del historial de periodismo cautivo que tiene RTVV, pero creo que en esto hay grados, grados intolerables y grados menos indignos. Si el PSOE vuelve a gobernar, tanto en el Estado como en la Comunitat, quiero creer que, como mínimo, el aire en este asunto será respirable, empezando por la difícil empresa de recuperar una radiotelevisión en lengua vernácula y con una línea de programación e información digna.

Respecto a lo de Castillo, pienso como él y como tú, pero prefiero este golpe de dignidad ante la muerte que el silencio de los corderos. Todo llega tarde, si, pero al menos nos estamos divirtiendo viendo a Rita cabreada como una mona y criticando el "golpe de estado" de los que van a enviar al paro, qué desfachatez tiene esta señora.